Edición

Por edición se entiende, para los fines de los servicios que se ofrecen en este portal, la adecuación de un texto para ser publicado.

El trabajo mediante el que se prepara un texto para publicación se denomina proceso editorial y en él participan varios colaboradores a cargo de las siguientes funciones:

Adecuar un escrito para publicarse requiere la participación de varios colaboradores editoriales. La función del supervisor editorial es coordinar a los colaboradores y evaluar su trabajo para garantizar que el artículo, manual o libro se escriba conforme a las normas de edición y esté listo para publicarse.

Publicación de originales

Al publicar por primera vez un artículo, manual o libro, el supervisor editorial coordina al:

  • Autor
  • Corrector de estilo
  • Revisor especializado
  • Lector final

Publicación de traducciones

En el caso de manuales o libros traducidos, el supervisor editorial coordina al:

  • Traductor
  • Corrector de estilo
  • Revisor especializado
  • Lector final
Mediante la corrección de estilo la obra se adapta a las normas del idioma para lograr claridad, precisión, coherencia y fluidez en la redacción.

La labor del corrector de estilo es muy compleja pues, entre otros aspectos, debe cuidar la ortografía de las palabras, enmendar las frases de sentido dudoso, utilizar el lenguaje adecuado al nivel de los lectores y uniformar términos.

El corrector de estilo tiene sólidos conocimientos morfosintácticos, ortográficos y tipográficos, además de una vasta cultura general, características que le permiten crear, como resultado de su trabajo, un texto escrito con propiedad.

Después de la corrección de estilo, un especialista en la materia de la que trata el manuscrito lo revisa para corregir errores de contenido, subsanar deficiencias de información, verificar datos y aprobar gráficos. Esta etapa del proceso editorial recibe el nombre de revisión especializada. Por ejemplo, un físico revisa un manuscrito de física, un abogado revisa un manuscrito de temas jurídicos, etcétera.

El revisor especializado cuida el buen uso de los términos y conceptos propios de la materia y verifica que estén actualizados. Presenta por escrito sus observaciones para que las considere el autor y éste haga las modificaciones al manuscrito que crea convenientes.

En el caso de traducciones, el revisor especializado garantiza el uso correcto y vigente de terminología.

Una vez que se han efectuado las tareas de corrección de estilo y revisión especializada, resulta indispensable una última lectura:

Por parte de un lector final. Un lector que no es ni el corrector de estilo, ni el revisor especializado, ni el supervisor editorial realiza esta lectura, a fin de hacer las últimas correcciones, que normalmente en esta etapa son errores de ortografía o de dedo.

Por parte del autor. Corresponde al autor leer el manuscrito línea por línea, después de que se realizaron la corrección de estilo, la revisión especializada y la lectura final. La lectura final por parte del autor tiene dos finalidades: Por un lado, dar el visto bueno a las modificaciones de las etapas anteriores. Por otro, hacer los últimos cambios que el autor juzgue convenientes, pues ésta es la última oportunidad que tiene para modificar el manuscrito. El autor manifiesta su aprobación firmando cada una de las páginas del manuscrito.

Por parte del supervisor editorial. El supervisor editorial es quien revisa por última vez el manuscrito, a fin de garantizar que el manuscrito reúna las condiciones apropiadas para entregarlo al solicitante del trabajo de edición a fin de garantizar que el manuscrito reúna las condiciones apropiadas para publicación.